Mariama es una de las tantas personas a las que acompañamos y atendemos en Huelva Acoge. Su travesía migratoria desde Marruecos hasta Canarias la realizó estando embarazada de manera muy avanzada. A punto de parir en el cayuco. Aunque todo empezó en su país de origen, Guinea-Conakri. Sufría abusos, malos tratos y vejaciones de su obligatorio segundo matrimonio, el hermano de su primer marido.
La autora de la entrevista es la compañera Elena Calero, abogada del equipo jurídico de Huelva Acoge.
ELENA: «…En realidad nos conocemos de hace ya tiempo, pero yo no sé quién es Mariama. Sé lo que me han contado, lo que he leído en el informe… Pero si un día te pregunto… ¿Tú quién eres? ¿Qué te gusta? ¿Quién es Mariama?».
MARIAMA: «Me gusta la tranquilidad».
ELENA: «De siempre, desde chiquitita… ¿Siempre?».
MARIAMA: «Siempre».
ELENA: «Siempre has buscado tranquilidad. Cuando eras pequeña en Guinea… ¿Tú plan favorito era estar tranquila en casa?».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «En el tema artístico: pintura, cantar… ¿Esas cosas te han gustado?».
MARIAMA: «Sólo me gusta cantar y bailar».
ELENA: «Cuando eras pequeña, ¿hasta qué edad fuiste al colegio?».
MARIAMA: «Hasta un año».
ELENA: «¿Qué edad tenías cuando tuviste que dejar el colegio? ¿Seis / siete añitos?».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «Cuando ibas al colegio y veías al/a profesor/a, tú pensabas en Mariama de mayor y… ¿A ti qué te habría gustado ser? O… ¿Qué te gustaría ser? Que siempre hay tiempo».
MARIAMA: «Me gustaría ser cosas bonitas. Pero no sé leer. Ahora, Dios me ayuda, y Carlos (el compañero de Huelva Acoge que imparte las clases de español) me ayuda para leer un poco y escribir un poco en las clases».
ELENA: «Y si hacemos un poco de magia y nos trasladamos al futuro, cuando Mariama ya habla un español perfecto y se maneja estupendísimamente… ¿A Mariama qué le gustaría ser? ¿Médico? ¿Traductora?…».
MARIAMA: «Traductora. Sí. Para ayudar a toda la gente, y para mí misma».
ELENA: «Cuando tú decides salir de Guinea, fue una decisión que tuviste que tomar de manera precipitada. ¿Cómo se vive ese momento en el que decides «me tengo que ir»? Sé que es romper mucho el discurso de «momento feliz» a trasladarnos ahora a una parte un poco más violenta, más dolorosa…; pero, ese momento en el que decides «ya no aguanto más», «tienes que salir de aquí»… ¿Cómo vives esa decisión que tomas de decir «me voy»? ¿Cómo fue ese día?».
MARIAMA: «En mi país, sufría la violencia de mi marido. Me pegaba y me abofeteaba. Vives con él y no puedes hacer nada. Prefieres salir del país. Mis hijos me veían sufrir. Pude salir de mi país. Necesitas irte y buscar una nueva vida».
ELENA: «¿Dirías que la violencia ha estado muy marcada en tu vida desde muy pequeña? ¿Cuándo empiezas a sentirte violentada?, ¿Cuándo ves que esa violencia la recibes tú?».
MARIAMA: «La violencia la recibo de mi segundo marido. Con mi primer marido no hubo violencia».
ELENA: «¿Qué edad tenías cuando te casaste por primera vez?».
MARIAMA: «Fue en el año 2005, cuando tenía 15-16 años».
ELENA: «¿Y la segunda vez?».
MARIAMA: «En 2012».
ELENA: «Falleció tu primer marido y, a los pocos meses, te casaron con el segundo».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «¿Era un hermano de tu marido con el que te casaste?».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «¿Por qué piensas que tu relación era tan distinta? Porque con tu primer marido fue bien y con el segundo, ¿Por qué fue tan mala?, ¿Qué pasó ahí?».
MARIAMA: «No, es que, en mi país, si tu marido muere, para ti es obligatorio casarte con el hermano del marido, es obligatorio para las dos familias, por no irte fuera, para vivir en una casa con la familia del marido».
ELENA: «Tú no tienes derecho a tener propiedades… ¿Tienes que irte con la familia de tu marido para poder seguir ahí».
MARIAM: «Sí, para cuidar a sus hijos, cosas de dinero».
ELENA: «Tú, en tu primer matrimonio, ¿Alguna vez habías pensado en la idea de salir y venir a España?».
MARIAMA: «No, porque mi primer marido me daba el dinero y con eso cuidaba de mi familia y mis hijos».
ELENA: «Él te daba el dinero y tú gestionabas. Eras dueña de ese espacio tuyo, ¿no? No estabas tan controlada, te sentías a gusto con él, …».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «Pero ya el segundo marido…».
MARIAMA: «No».
ELENA: «Vale. ¿Cómo fue el viaje? Sé que tú no vienes directamente desde Guinea Conakri. Tú pasas por algún país, haces una ruta,…».
MARIAMA: «Sí, yo paso por Senegal y Marruecos. Y de Marruecos a España».

ELENA: «¿Cómo fue el paso…, esa mochila de salir sola cuando tú, además, es la primera vez que coges, te vas con una mochila, coges tus cosas…?».
MARIAMA: «Sí, a la aventura, coges tus cosas…».
ELENA: «¿Cómo fue el viaje? ¿Sentiste miedo, conociste a gente, …?».
MARIAMA: «Sí, sentí miedo porque tienes hijos. Tres hijos detrás. Sé que mi madre cuida a mis hijos bien, gracias a Dios. Todos ellos están bien. Entonces, pasas de Guinea a Senegal, tres días, pasas meses en Marruecos…, diciembre de 2022…sí».
ELENA: «Senegal fue muy poquito, ¿no? Fue un país de tránsito solo».
MARIAMA: «Sí, 3 días en Senegal».
ELENA: «En el viaje, ¿Tú conoces a alguien?, ¿Se te acerca alguien?, ¿O vas siempre sola?».
MARIAMA: «No, sola. Yo siempre sola».
ELENA: «Y en Marruecos sí pasas más tiempo, ¿no? ¿Cuánto tiempo estuviste?».
MARIAMA: «Once meses».
ELENA: «¿Cómo fue el trato que recibiste en la sociedad de Marruecos?, ¿Cómo te trató?».
MARIAMA: «El trato de personas marroquís…, pues unas bien y otras mal. Las personas de color negra no tienen libertad. Aquí, hay mucha gente, hombres y mujeres que duermen fuera, otras están embarazadas, gente… Hay hombres allí que pegan a personas por coger su dinero, sus cosas…».
ELENA: «Entonces, se ha creado mala fama; por así decirlo».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «Pasas once meses en Marruecos. En ese tiempo, ¿Estableces lazos?, ¿Haces vínculos con amigos, amigas?, ¿Conoces a alguien que te ayuda…?».
MARIAMA: «Solamente con el padre de Aboubacar».
ELENA: «¿Qué tal fue la relación con él?».
MIRIAMA: «Está ahora… porque… ¿Cómo decir…?».
MARIAMA: «Discriminación».
ELENA: «¿Discriminación?».
MARIAMA: «Sí. Entonces salió fuera de Marruecos y ahora está en Argelia».
ELENA: «Por lo que recuerdo de tu historia, cuando hemos hablado otras veces…, ¿La idea de él al principio era venirse contigo a España?, ¿Os ibais a venir juntos o eso no era una idea que tuvieseis?».
MARIAMA: «No, yo… I met him there in Morocco (Lo conocí allí en Marruecos)».
ELENA: «Nada. Cada uno siguió su camino. La relación con él ahora… ¿Tenéis algún tipo de contacto?, ¿Le mandas fotos o vídeos de tu hijo?, ¿Es buena la relación?, ¿Te pregunta por él?».
MARIAMA: «Sí».
ELENA: «Bueno, llega un momento difícil y doloroso. El de meternos con un barrigón en un cayuco. ¿Por qué decidimos eso?, ¿Por qué me tuve que meter hoy?, ¿Era porque salía la embarcación justo aquel día, ¿Era algo que llevabas pensando hacerlo antes?, ¿Cómo fue la decisión de venirte a España?».
MARIAMA: «Porque yo hablé con mi madre y me dijo que mi marido me estaba buscando. Entonces, yo no quiero vivir en Marruecos. Quiero irme de Marruecos, porque él me verá y me tendré que volver a Guinea. Pero yo no quiero volver. Y encima estoy embarazada sin casarme. ¿Sabes? No, no puedo. Mi familia se enfadará conmigo, y los demás también».
ELENA: «Todo el mundo enfadado y es un riesgo para ti».
MARIAMA: «No tengo otra opción. Me entero por una llamada de teléfono que recibo de mi madre que mi marido me está buscando y que va para Marruecos, donde yo me encontraba en ese momento
ELENA: «Claro, como se enterase de que estabas embarazada de otro hombre, además de que te habías ido de Guinea, entiendo que las consecuencias iban a ser muy duras y ante el miedo no lo pensaste y te metiste en el barco. ¿Tuviste que pagar por hacer el viaje? Es decir: ¿Cómo gestionas montarte en un cayuco para llegar a Canarias?, ¿Te enteraste en la playa de que iba a salir una embarcación?, ¿Cómo fue? ¿Cómo te enteras?».
MARIAMA: «Yo estaba buscando pescado en la playa para vender en Marruecos para tener dinero para poder comprar comida y otras cosas, para alquilar un piso. Entonces, resulta obligatorio buscar dinero. El padre de Aboubacar me ayuda mucho».
ELENA: «¿El padre de Aboubacar quería que te fueras a España para que estuvieras a salvo, o tú querías venirte a España?».
MARIAMA: «Sí. Y porque él sabe que mi marido me está buscando. Entonces yo no quiero vivir con él allí con ese miedo continuo».
ELENA: «¿Cuánto cuesta un pasaje para venir hasta aquí?»
MARIAMA: «Yo, la verdad es que no lo sé».
ELENA: «¿No lo pagaste tú?».
MARIAMA: «Yo pagué 500 euros, pero no sé si el padre del niño pagó otra parte. No lo sé».
ELENA: «¿A ti te dijeron ‘un día a tal hora hay que estar en este sitio’?»
MARIAMA: «Sí. El día 14».
ELENA: «¿Cuánto duró el viaje?».
MARIAMA: «24 horas».
ELENA: «¿Y cómo fue el viaje en tu estado? Porque estabas ya con el embarazo muy avanzado…».

MARIAMA: «Muy malo, porque había mucha gente en la embarcación. Unas 60-80 personas en un barco chiquitito. Muy poca comida. Yo vomitaba. Todo el mundo vomitaba en el barco. ‘Si yo miro el agua.. mi cabeza dará vueltas’ «.
ELENA: «¿Había menores y mujeres en el barco?».
MARIAMA: «En mi embarcación, cuatro mujeres y un bebé».
ELENA: «Llegaste a Canarias el día 15. ¿No?».
MARIAMA: «Sí, y mi hijo nació el 18».
ELENA: «¿Qué es lo que más te llama la atención la primera vez cuando pisas España?».
MARIAMA: «La atención y la ayuda de la gente. Yo llego a las siete de la mañana y nos cogen y nos llevan a Cruz Roja. Allí nos atendieron, dieron otra ropa, me llevaron al hospital para una ecografía y mirar todo mi cuerpo».
ELENA: «¿Qué te dijeron cuando te vieron en ese estado de embarazo? ¿Te quedaste en el hospital o regresaste para el momento de dar a luz?».
MARIAMA: «Me cambiaron de ropa y me llevaron en ambulancia. Y ya me quedé allí hasta tener al bebé».
ELENA: «Hemos repasado un poquito quién era Mariama, qué quiere ser Mariama, porque mariama sigue teniendo sus sueños y proyectos de vida. Ahora quiere ser Traductora e Interprete. Hemos repasado por qué… Ahora hablando de otra cosa, y comparando sociedades… ¿Qué te sorprende a ti como mujer migrante aquí en España?, ¿Cómo se ve a la mujer europea?; como mujer, ¿Qué te ha llamado la atención cuando has llegado a España al relacionarte con otras mujeres?, ¿Qué es lo que más te ha sorprendido?».
MARIAMA: «Cuando yo llego a España, la primera cosa que no sé es la lengua. No había escuchado nada de español, ni sabía hablarlo un poco. Eso es muy malo porque me siento que yo también quiero hablar con otra persona, entonces yo me esfuerzo para hablar un poco y entender a la gente, y tengo ganas de hablar en español con otra gente».
ELENA: «A día de hoy, ¿Tienes contactos aquí en España con las que sueles hablar español?».
MARIAMA: «Tengo amigas. En Lorca tengo una hermanita, y todo está bien; pero no hablo mucho».
ELENA: «¿Cómo te sientes en España?, ¿Querida?, ¿Apoyada?, ¿Has tenido algún problema en la calle con alguien? Ese tema racista que comentabas que has sufrido en Marruecos … ¿Lo has sufrido aquí?».
MARIAMA: «No. Aquí en España, la verdad es que no lo he sufrido. De momento, no. Porque no he tenido aún una entrevista de trabajo ni un trabajo en España».
ELENA: «¿Cómo es tu día a día en España? ¿Cómo es un día cualquiera en la vida de Mariama? Por ejemplo: Un lunes, un martes…».
MARIAMA: «Bien. Me levanto bien. Me duermo bien. Todas las cosas están bien».
ELENA: «Y con el peque, Aboubacar, ¿Bien? ¿Te manejas bien con él?».
MARIAMA: «Bien. Sí».
ELENA: «¿Él como va con su español? No habla nada todavía, ¿no?, ¿Qué edad tiene?, ¿Un añito y medio?».
MARIAMA: (Ríe) «Ahora tiene 17 meses».
ELENA: «Y ‘mamá’ si lo dice, ¿no?».
MARIAMA: (Ríe) «Sí, me dice ‘moamá’; dice ‘quién’ «.
ELENA: «Aprendiendo, jeje… ¿Tú vas al parque con él? ¿Te relacionas allí con otras mujeres?».
MARIAMA: «No. Me quedo sola y miro cómo Aboubacar juega».
ELENA: «Y ya lo último por preguntarte: ¿Alguna última reflexión, petición o algo que quieras compartir? Por ejemplo: ‘Mira, Elena, después de un año y medio aquí en España… me siento así, de esta forma, de la otra’…».
MARIAMA: «De momento, no».
ELENA: «¿Te has sentido arropada con Huelva Acoge?».
MARIAMA: «Sí. Huelva Acoge me ayuda mucho. Mil gracias a todas las personas de aquí».